Historia del escudo de España (sin actualizar)
Publicado: Mar, 21 Abr 2015, 20:49
LOS REYES CATÓLICOS (1469-1516)
El primero de los escudos que puede considerarse en alguna medida como Escudo de España es el que, con el águila de San Juan como soporte, adoptaron Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón en 1475. En este escudo quedaban representadas de forma intencionada y políticamente equilibrada las dos mayores entidades políticas existentes en la Península Ibérica a finales del siglo XV: la Corona Castellano-Leonesa, que se extendía de norte a sur de la península, desde el Cantábrico al Mediterráneo, y que comprendía los territorios de las actuales Comunidades Autónomas de Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, La Rioja, Castilla y León, Madrid, Extremadura, Castilla-La Mancha, Murcia, Andalucía y Canarias; y la Corona de Aragón, o Confederación Catalano-Aragonesa, que agrupaba a las actuales Comunidades Autónomas de Aragón, Cataluña, Comunidad Valenciana e Islas Baleares, además de otros territorios extra-peninsulares, repartidos por la cuenca mediterránea.
Unidas ambas Coronas bajo la misma Monarquía, son el origen más inmediato de la España actual, cuya extensión territorial no quedó, sin embargo, completa hasta la reconquista de Granada en 1492, y la posterior incorporación del Reino de Navarra a la Corona de Castilla, tras su conquista por Fernando El Católico en 1515.
El escudo se diseñó adoptando el modelo establecido por Fernando III al unir los reinos de Castilla y León en 1230, en el que en un escudo cuartelado se alternaban los emblemas de ambos reinos. En el nuevo escudo, las armas de Castilla (de gules, y un castillo de oro, almenado de tres almenas, con tres homenajes, el de en medio mayor y cada homenaje también con tres almenas, mamposteado de sable y aclarado de azur) y León (de plata y un león de púrpura, coronado de oro, lenguado y armado de lo mismo) se alternan con las de Aragón (de oro y cuatro palos de gules) y las Dos Sicilias (partido y flanqueado, jefe y puntas de oro y cuatro palos de gules, flancos de plata y un águila de sable, coronada de oro, picada y membrada de gules). A partir de 1492 se añade entado en punta con el emblema del recién conquistado reino de Granada (de plata y una granada al natural, rajada de gules, tallada y hojada de dos hojas de sinople). Éste es el escudo que sirvió de inspiración para el que el régimen de Franco adoptó tras la Guerra Civil y que, con ligeras variaciones, estuvo vigente hasta la promulgación de la Ley 33/81, de 5 de octubre, por la que se establecía el nuevo Escudo de España, que erróneamente se ha dado en denominar “Escudo Constitucional”, ya que no se encuentra recogido en la constitución. En el modelo escogido por el Régimen franquista las armas del Reino de las Dos Sicilias fueron sustituidas por las de Navarra que no figuraban en el escudo originario (entre otras cosas porque la incorporación de Navarra a la Corona de Castilla fue posterior a la muerte de Isabel La Católica), al contrario que la representación del Reino de Granada que se incorporó a las armas reales a partir de 1492. Y éste es también el modelo básico que, con las variantes impuestas por los usos, modas y circunstancias de cada momento, ha perdurado hasta nuestros días. Puente de Alcántara (Toledo) Escudo de los Reyes Católicos en 1475 Escudo de los Reyes Católicos antes de la toma de Granada Escudo de los Reyes Católicos desde 1492
El primero de los escudos que puede considerarse en alguna medida como Escudo de España es el que, con el águila de San Juan como soporte, adoptaron Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón en 1475. En este escudo quedaban representadas de forma intencionada y políticamente equilibrada las dos mayores entidades políticas existentes en la Península Ibérica a finales del siglo XV: la Corona Castellano-Leonesa, que se extendía de norte a sur de la península, desde el Cantábrico al Mediterráneo, y que comprendía los territorios de las actuales Comunidades Autónomas de Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, La Rioja, Castilla y León, Madrid, Extremadura, Castilla-La Mancha, Murcia, Andalucía y Canarias; y la Corona de Aragón, o Confederación Catalano-Aragonesa, que agrupaba a las actuales Comunidades Autónomas de Aragón, Cataluña, Comunidad Valenciana e Islas Baleares, además de otros territorios extra-peninsulares, repartidos por la cuenca mediterránea.
Unidas ambas Coronas bajo la misma Monarquía, son el origen más inmediato de la España actual, cuya extensión territorial no quedó, sin embargo, completa hasta la reconquista de Granada en 1492, y la posterior incorporación del Reino de Navarra a la Corona de Castilla, tras su conquista por Fernando El Católico en 1515.
El escudo se diseñó adoptando el modelo establecido por Fernando III al unir los reinos de Castilla y León en 1230, en el que en un escudo cuartelado se alternaban los emblemas de ambos reinos. En el nuevo escudo, las armas de Castilla (de gules, y un castillo de oro, almenado de tres almenas, con tres homenajes, el de en medio mayor y cada homenaje también con tres almenas, mamposteado de sable y aclarado de azur) y León (de plata y un león de púrpura, coronado de oro, lenguado y armado de lo mismo) se alternan con las de Aragón (de oro y cuatro palos de gules) y las Dos Sicilias (partido y flanqueado, jefe y puntas de oro y cuatro palos de gules, flancos de plata y un águila de sable, coronada de oro, picada y membrada de gules). A partir de 1492 se añade entado en punta con el emblema del recién conquistado reino de Granada (de plata y una granada al natural, rajada de gules, tallada y hojada de dos hojas de sinople). Éste es el escudo que sirvió de inspiración para el que el régimen de Franco adoptó tras la Guerra Civil y que, con ligeras variaciones, estuvo vigente hasta la promulgación de la Ley 33/81, de 5 de octubre, por la que se establecía el nuevo Escudo de España, que erróneamente se ha dado en denominar “Escudo Constitucional”, ya que no se encuentra recogido en la constitución. En el modelo escogido por el Régimen franquista las armas del Reino de las Dos Sicilias fueron sustituidas por las de Navarra que no figuraban en el escudo originario (entre otras cosas porque la incorporación de Navarra a la Corona de Castilla fue posterior a la muerte de Isabel La Católica), al contrario que la representación del Reino de Granada que se incorporó a las armas reales a partir de 1492. Y éste es también el modelo básico que, con las variantes impuestas por los usos, modas y circunstancias de cada momento, ha perdurado hasta nuestros días. Puente de Alcántara (Toledo) Escudo de los Reyes Católicos en 1475 Escudo de los Reyes Católicos antes de la toma de Granada Escudo de los Reyes Católicos desde 1492